Profesor Ángel Perez Cruz

Por Profesor Ángel Perez Cruz

¿Que Pasa en la Iglesia de Hoy?

Tienen Biblia y no la entienden. Extraen versículos sacándolos de su contexto y convirtiéndolos en amuletos o sortilegios en las congregaciones.

Son Sal pero no sazona; Enseña y predican sin coherencia, motivados por el impulso y no la dirección divina.

Fue llamada a vivir por Fe pero vive por escrúpulos de Fe.

Fue llamada hacer diferencia y esta en abierta competencia a los espectáculos del mundo.

Tiene autoridad para sanar pero no ejerce dicha autoridad.

No predica, ahora entretiene y habla de proyectos a largo plazo.

Habla de la voluntad de Dios pero le dice a Dios lo que tiene que hacer. Su himnologia no es sacra, ya no comunica la Fe, sino un espiritualismo sin compromiso. La adoración no es colectiva sino controlada creando una coreografía y escenario de juego de luces para despertar el subconsciente y darle rienda suelta a los sentimientos.

Antes tenía siervos ahora tiene apóstoles y artistas que predican y cantan por inspiración propia.

La Venida del Señor no es el tema de prioridad en los púlpitos, es algo anticuado.

El pastorado más que un don de ministerio es una posición que hoy no permite la recomendación de su congregación porque entienden que son la conciencia de la iglesia y los otros dones de oficio tienen que estar por debajo del don pastoral.

Fue llamada para proclamar el mensaje salvífico produciendo unidad, conocimiento, madurez seguido por crecimiento en membrecía. Pero quiere producir resultados que no le compete.

Fue llamada hacer integra pero por impulso más que dirección divina toma decisiones que compromete financieramente sus congregaciones y malversa fondos constantemente teniendo a sus miembros en deudas eternas.

Hace más actividades de entretenimiento que la misión evangelizadora.

Fue llamada a producir discípulos pero solo produce seguidores y creyentes que tienen compromisos con sus líderes pero no con Dios.

La Iglesia de hoy está espiritualmente enferma por nuestra propia irresponsabilidad. No es luz porque a dejado de resplandecer en Cristo.

No tenemos vida contemplativa en Cristo tenemos vida contemplativa en nosotros mismos. Es hora de despertar del marasmo espiritual.