(FOTOS, @valenC8)

Por Guillermo Siles Paz

Cuando en la escuela estudiaba historia, me hablaron que en el año 1987 se había abolido la monarquía, pero ya poco a poco fui creciendo y conociendo mejor la historia, y ciertamente no había sido así, solo que Francia hizo la revolución, pero no afecto a los otros países. Claro hoy no tienen la misma importancia de hace siglos. Sin embargo, hacen noticia y llaman la atención.

Cuántas veces hemos visto las películas de Disney y ahí veíamos las grandes historias de como el príncipe azul, la bella durmiente, la cenicienta, etc. Pero desde que la televisión ha ido desarrollando ahora podemos ver en vivo y en directo estos cuentos de hadas. Para mí el momento más espectacular de la televisión que tiene que ver con los reyes fue cuando murió Leydi di, Diana de Gales, que nos abrió los ojos a esta nueva realidad de la realeza. Luego viendo algunos programas de farándula española veía los pormenores de la vida es de los duques, príncipes, infantas, etc.

Lo cierto que ya poco a poco sabemos que este mundo de los reyes y príncipes siempre se hacen atractivos. En este contexto ver hoy un matrimonio de un príncipe, sigue siendo un cuento de hadas aparte de ser tan original en todos los pormenores. La televisión te envuelve de muchos símbolos.

Así que hoy los millones de espectadores han disfrutado de esta función gratis.

Hoy cuando se vieron esperar a Harry ahí en el centro del templo, se notaba que había sentimientos profundos. Hoy se dio el día, Harry y Meghan dieron el sí tan esperado.

La boda más importante del año fue un total éxito y la pareja mostro un carisma muy especial porque desde hace días ya cautivaron a millones. Seguro que muchos canales internacionales reflejaron todo ese amor que se irradiaba en sus rostros, en sus miradas.

El príncipe Enrique que recibió ahora a la norteamericana Meghan Markle, después de casados pasan a ser duques De Sussex. La ceremonia fue muy somera, simbólica y bien organizada. El rito religioso fue anglicano, les unió para ser marido y mujer.

Yo creo que muchos viendo esta ceremonia sueñan también pasar por el altar y disfrutar de la bendición de Dios y la unión familiar. Pero para llegar a este momento es necesario de estar enamorados y con ese amor transformar su propia vida.

Cuando el matrimonio es bendecido, es consagrado para producir más vida. Por eso al mirar los rostros de los novios, entendemos que ahí si hay alegrías y esperanzas.

(FOTOS, @valenC8)